“Nada hay más fugaz que la forma exterior, que se marchita y se altera como las flores del campo cuando llega el otoño.”
Olvidé el
maquillaje, los aderezos y la seguridad en el fondo del cajón donde escondía
los miedos, los temores y las preocupaciones. Los doblé cuidadosamente mientras
me repetía que así debía ser. Me miré una última vez en el espejo y volví a
colocar por enésima vez esos rebeldes rizos castaños aun sabiendo que era
inútil. Mi reflejo me mostró mi verdadero rostro, un rostro que me había
empeñado en ocultar y que ahora escondía tras unas gafas.
En ese
momento sonó el teléfono. Sonreí con calidez a la chica que me miraba desde el
espejo en un intento de darle la seguridad que fingía tener e inspiré hondo.
La que salió
por la puerta fue la niña que se esconde en el cuerpo de la chica del espejo.
La que tiene los miedos pintados en la cara que cubre con maquillaje, los
temores tatuados en el cuerpo que viste con aderezos y las preocupaciones ocultas
tras esa máscara de seguridad fingida. La que se esconde en el cajón por miedo
a que la lastimen. Cuídamela, es frágil.
PERFECTO! me ha encantado y me identifico muchísimo felicidades!!! Un besito! :)
ResponderEliminarGracias cielo! Me alegro de que te haya gustado! un besoo!
EliminarMe ha encantando, me sentí demasiado identificada, y creo que por eso, me emocione un poquitín. Justo lo que no sé como escribirlo, lo que escribiste tú.
ResponderEliminarUn placer.
¡Un beso!
Sí, hay veces que necesitamos que otros escriban aquello que nosotros no sabemos explicar. Tú puedes!
Eliminarun besoo!
Ha sido perfecta la manera cómo lo has escrito. Te juro me he sentido identificada y me ha encantado leerla. Tienes nueva seguidora :)
ResponderEliminarSi quieres puedes pasarte por mi blog:
http://mylifeenpocaspalabras.blogspot.com.es/
Es todo un éxito para mí conseguir que te sientas identificada.
Eliminarun besoo!