“Sentada, con los ojos cerrados, la muchacha casi se creía en el País de las Maravillas, aunque supiera que, con solo abrir de nuevo los ojos, todo recobraría su insípida realidad.”
Es asombroso ver cómo las personas, ante un atisbo de esperanza, con la mera posibilidad de algo, simplemente con una mínima posibilidad, podemos soñar, volar, creer.
Y es que esa ilusión llena nuestro corazón de cálidos sentimientos, de grandes momentos, de risas… nos abre un mundo de nuevas expectativas, planes…
... y lo más importante de todo: nos hace pensar que todo es posible.
Be Unic.
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